Hoy he asistido a una conferencia impartida por Hervé Philippe, experto en el campo de la filogenómica y que además ha resultado un personaje bastante peculiar. La primera parte de su charla ha versado sobre cuestiones relativas al estudio de la biodiversidad y la evolución mediante técnicas filogenéticas y filogenómicas, y ha abordado detalles de las técnicas actuales de inferencia filogenética, mostrando sus debilidades y proponiendo variaciones en los métodos clásicos de construcción de filogenias para intentar conseguir una mayor exactitud en la interpretación de las relaciones entre los organismos (al que le interese el tema puede pinchar en estas referencias).
Pero lo más interesante ha sido, sin duda, la segunda parte de la charla: ya desde el principio el investigador ha avisado de que esta segunda parte abordaría una cuestión que rara vez se tiene en cuenta entre la comunidad científica. Un buen día, este señor se dedicó a calcular la cantidad de energía y recursos que invertía su grupo en la computación de los complejos árboles filogenéticos y alineamientos de secuencias que forman el grueso de sus resultados, y por tanto, de sus publicaciones, y comprobó con estupor que producía al año una cantidad de emisiones de CO2 casi tan grande, o incluso más, que muchas industrias. La reflexión que plantea, pues, es la siguiente: ¿no es un precio demaisado alto? Aunque la tecnología nos permita desarrollar estos trabajos de investigación tan eficientes, ¿no es irresponsable estudiar el cambio climático e intentar proponer a la sociedad soluciones, cuando se está formando parte del problema? Tras múltiples ejemplos (entre ellos, la cantidad de electricidad que consume el recién construido acelerador de partículas LHC del CERN con cada experimento) ha planteado que tal vez la manera más ejemplar de concienciar a la sociedad de que la tecnología no es la solución para los problemas medioambientales y ecológicos que sufrimos actualmente, sea frenar el ritmo de las investigaciones científicas. Así de radical. Ante las caras de pan que se nos ha quedado a los asistentes, ha aclarado que tal vez reducir el ritmo de nuestras experimentaciones y centrarnos más en optimizar recursos y estudiar más detenidamente los experimentos que diseñamos antes de lanzarnos a realizarlo, sólo porque disponemos de los recursos para ello, fuera una buena manera de seguir avanzando en el conocimiento.
Según Philippe, nos estamos cargando varias ramas del árbol de la vida con nuestras propias investigaciones y árboles filogenéticos. Paradójico, verdad?
Bien, no os daré muchos más detalles ni os contaré cómo han reaccionado los oyentes. Mi intención más bien es preguntaros vuestra opinión al respecto, y me guardo la mía para los comentarios. Sólo diré que para mi ha sido algo chocante, nunca había pensado que precisamente la investigación que puede encontrar soluciones y explicaciones a los problemas medioambientales del mundo moderno fuera tan responsable de esos mismos problemas como para plantearse el cesar sus actividades, aunque sea parcialmente.
Es evidente que la hemos pifiado bastante con el planeta en los últimos años: todos intentamos, el que más y el que menos, reducir nuestras emisiones (de CO2, malpensados) y controlar el gasto energético en nuestra vida cotidiana, pero cuando nos tocan nuestro trabajo y lo que consideramos parte de la solución precisamente a este problema... vaya, entonces, ¿qué narices hacemos?
Resumiendo, las cuestiones son: ¿es la disponibilidad de tecnología demasiado avanzada la mayor responsable del despilfarro energético actual? ¿son los científicos los primeros que deberían controlar esta tecnología y retrasar su traslado a la sociedad, para que este abuso no sea continuo y desmedido?
Hagan juego, señores.
¡Tío! ¡Me ha entusiasmado este post! En primer lugar creía que no conocía a este señor, pero cuando me he ido a las referencias que enlazas, me he dado cuenta de que me ha tocado leerle varias veces. Qué suerte la tuya, no siempre se tiene la oportunidad de ir a una conferencia como esa. Me habría encantado asistir a la primera parte, seguro que resulta inspirador.
ResponderEliminarSin embargo, leer sobre la segunda parte me ha gustado más aún. Me ha sorprendido muy gratamente que sea una persona tan mentalizada. Hasta hace poco yo hacía taxonomía clásica, gastaba papel y cartón, una lupa y un microscopio. Con eso puedes hacer investigación de primer nivel. Sin embargo, desde que le doy a la filogenia me fijo en la cantidad de basura que genero y de energía que consumo: aparatos carísimos, montañas de puntas de pipetas, tubos de plástico, productos químicos, energía para la secuenciación, etc. Me imagino que la huella ecológica de un laboratorio de filogenómica como el suyo tiene que ser espectacular. Eso por no hablar de los congresos, en los que se moviliza por avión a cientos de personas en plena era de internet. Además, la industria científica (que es una máquina de hacer churros), más preocupados por los índices de de impacto (que viene a ser tan especulativo como el karma de Menéame) y de la producción en masa para conseguir ganarte los garbanzos es un cáncer que no mejora la situación.
Mi opinión está clara: sí, habría que reducir el consumo de recursos y el ritmo en la investigación, pero no porque sea la ciencia, es que deberíamos pisar el freno de nuestro derroche en TODOS los sentidos. Esta forma de vida es insostenible y serían necesarios cambios radicales para asegurar nuestra supervivencia a largo plazo.
¡DECRECIMIENTO YA! Y olé por los huevos de Philippe. Hay que tenerlos cuadrados para ser un pope y decir eso en una conferencia. Me quito el cráneo.
¡Toma ya, qué éxito! Me alegra que te haya gustado tanto...
ResponderEliminarPues sí, hay mucho de razón en lo que decía este hombre, pero es cierto que a mi me ha parecido en cierto modo algo exagerado y catastrofista. Yo veo que la reducción y optimización que habría que hacer es la misma, ni más ni menos, que la que deberíamos hacer todos en nuestra vida cotidiana. Pero de ahí a reducir el ritmo de las investigaciones... está claro que a veces derrochamos, pero otras tantas veces, haciendo "pruebas" o experimentos "a ver qué sale", descubrimos o nos inspiramos para hallar nuevas vías y soluciones a otros problemas. Creo que habría que separar "ritmo" de "sostenibilidad", no creo que la manera de optimizar sea enlentecer, sino actuar con algo más de cabeza y sentido común.
Pero lo que más me joroba es que mientras nos planteamos cosas tan serias como investigar a un ritmo más pausado o incluso reducir los avances tecnológicos, el resto del planeta genera unos residuos y una energía brutalmente mayor en sus ratos de ocio, en tradiciones absurdas y en costumbres arraigadísimas que no tienen nada de sostenible ni saludable. Vamos, que habría que empezar por ahí, digo yo.
Es curioso que nombres lo de los congresos, porque él también lo ha mencionado...¡tienes mente de pope, amigo!
Gracias por tu aportación amigo del blogoplancton, un saludo.
Pues sinceramente, puede que la reflexión sea sorprendente por ser de quien es, pero poco más... El LHC es una obra maestra de la ingeniería que pretende resolver alguno de los misterios más importantes a los que jamás se ha enfrentado el hombre. Es el mayor experimento de la historia. Eso tiene valor. Que tiene un coste energético y medioambiental. Por supuesto, todo lo tiene. Pero hay cosas que merecen la pena. Esto es como lo de decir que no hay que mandar nada a Marte porque hay mucha hambre en el mundo. La ciencia es una actividad noble (con sus defectos), no es ahí donde debe empezar el decrecimiento. Está bien pensar en que todos debemos colaborar... pues bien, no vayan ustedes en coche. Con eso arreglaríamos un buen cacho del problema.
ResponderEliminarEn fin, me da la sensación de que hay gente que no sabe como llamar la atención. Entre los científicos esto es muy habitual, por cierto.
Vaya, una cuestión de lo más interesante,a la par que polémica.
ResponderEliminarBien, partamos de la base de que no he entendido la mitad de los términos que habéis manejado. No sé qué es la filogenómica, ni la inferencia filogenética, ni los alineamientos de secuencias... Si bien, poco a poco, me voy familiarizando con ellos. Entonces, pensaréis, ¡qué haces leyendo un blog de este tipo! Eso es lo de menos, ¿no?.
En cuanto al debate generado, diré que, en la rama a la que me dedico (arquitectura), la tendencia última es ir en busca de la sostenibilidad, buscando soluciones para viviendas con menos emisiones. Entonces, sería fácil pensar: "Si nosotros lo hacemos, ¿porqué no lo pueden hacer todos?, sea la disciplina que sea?". Todos sabemos que en 20 años el mercado no estará copado por viviendas sostenibles, ni de vehículos eléctricos, ni de energías renovables (o éste sí,"gracias" a la especulación que se va a generar en torno a ellas), etc.
Por tanto,pienso que: todos deberíamos apretarnos el cinturón, pero, si hay una disciplina que, en mi opinión, debiera hacerlo "menos", es la ciencia. Frenándola, se frenaría el avance de toda una sociedad, que no podría seguir mirando hacia delante, como lo ha estado haciendo hasta ahora. Quizá sea eso lo que deberíamos plantearnos, frenar nuestro ritmo de vida y expectaciones.
Eso es algo que ya dejo abierto...
Vaya, según veo fue una conferencia muy interesante! De todos modos, creo que tanto Dr. Litos como eulez tenéis mucha razón, ralentizar el ritmo en investigación científica no parece ser una solución óptima. El ultraconservacionismo ambiental tendrá aires de respetabilidad llamativos, pero tomar medidas antiprogresistas puede ser innecesario (cuánto prefijo!).
ResponderEliminarCreo que lo importante ya lo habéis dicho: la clave está en actuar con sentido común, simplemente. Y, por supuesto, esto debería extenderse a todos los ámbitos posibles. Es más, en ciencia, precisamente este cambio de actitud podría favorecer un aumento de la eficiencia (y con ello tal vez el ritmo) de las investigaciones. Ésta sí me parece una propuesta admirable. Además, las consecuencias de esto podrían contribuir más aún a la lucha por la conservación del medio ambiente, no sólo por la paliación de daños per se, sino por la obtención de mejores resultados!
Aún así, es posible que el mensaje de Phillippe tenga sentido: si no hubiese llamado la atención con comentarios así de radicales, probablemente no generaría ningún tipo de debate (y no estaría estrenándome como comentador del blog en esta entrada!). Sólo espero que la posición extremista no sea la más extendida. ¡Bastante nos van a ralentizar el ritmo en ciencia durante los próximos años, como para que encima les aparezcan argumentos a su favor!
Un saludo y enhorabuena por el blog!
=)
Totalmente de acuerdo en que la ciencia es algo noble. Es más, la ciencia puede ayudarnos a optimizar nuestro modo de vida y reducir nuestra huella ecológica. ¡Es más!, es precisamente gracias a la ciencia por lo que sabemos que tenemos un problema.
ResponderEliminarAclaro que no estoy en contra ni del LHC ni de la carrera espacial. Eso es el chocolate del loro. Efectivamente, con resolver el gran problema de la movilidad de personas y mercancías se adelantaría muchísimo. Si digo que el ritmo de la ciencia debería calmarse es como parte de una estrategia global, de un cambio de paradigma que, lamentablemente, siento que no se va a producir. El problema no se soluciona simplemente reciclando más. Es un asunto de tremendo calado. Soy muy pesimista respecto a este tema, muchos diríais que catastrofista; normalmente no se me nota porque ya hace tiempo que preferí no amargarme la existencia por sufrir el síndrome de Kasandra.
Nuestro ritmo de vida es frenético, da igual a lo que nos dediquemos, pero en este sentido la ciencia sufre especialmente los síntomas: es un mundo muy competitivo en el que te fuerzan a ir a toda velocidad. Si se diese el cambio de paradigma, eso también habría que controlarlo, pero efectivamente, sin ciencia no hay futuro.
No sé qué motivó al Philippe a hablar de eso en la conferencia, no digo que no sea sólo por llamar la atención, pero después de matizar lo que digo arriba insisto en que desde mi punto de vista tiene toda la razón.
Muy interesante si senyor,… de cualquier manera yo tengo unas dudas horrorosas a cerca de los cálculos o las comparaciones de nuestro amigo Hervé Philippe. No estoy al corriente de su investigación, ni de sus avances… ni por supuesto, he hecho los calculos (seguro que si me pongo los hago de pena) pero tener 365 dias un Silicon, o tres, rulando a todo trapo para hacer calculos filogenéticos, no digo que no consuma energía, pero no creo que consuma ni una millonesimaparte que por ejemplo cualquier acerrea, conservera, o “plastiquera” que rinda un mínimo en el mercado, por supuesto si lo comparas con lo que gasta la industria carnicera de mi pueblo… ahí ahí.
ResponderEliminarEs cierto que muchasveces nos tendriamos que plantear 3 veces los experimentos antes de hacerlos, pero, desde tiempos inmemoriales la ciencia es esnayo-error y por más que planees, pieneses y te rompas la cabeza… al final, siempre hay imprevistos
hipótesis erroneas o no tan acertadas y se necesita replantear y re-pipetear (ensayo-error). Esto genera mucha basura sí, pero si a alguien le parece que la ciencia deberia bajar el ritmo por la contaminación que genera, yo le preguntaría:
1- de verdad crees que tanto ha avanzado la ciencia y tanto saber acumulamos como para dejar de buscar respuestas??
2- si la ciencia baja su ritmo para no contaminar, vas tu a ducharte 1 vez cada dos semanas, usarás la bicleta, el coche de sanfernando, veranerás a 4 km de tu casa y dejarás de tomar antibióticos, analgésicos, y cerbeza fría??
Yo comparto la opinión de Eulez y el pesimismo de Copepodo. Es cierto que nos estamos cargando el planeta, y si bien es cierto que la ciencia es parte del problema (Todos nos hemos preguntado donde van a parar los residuos de nuestro laboratorio ), hay que tener los “guevos” muy gordos para decir que la culpa del despilfarro energetico y la contaminacion es de los avances científicos y la tecnología. Es como decir que la culpa de un asesinato la tiene el cuchillo y no el que acuchilla. El cuchillo es parte del crimen, sí, pero la culpa es del que blandiendo el cuchillo arrebata la vida. Que no se nos olvide que el cuchillo es una herramienta que ha dado de comer al ser humano por milenios.
La culpa de la mierda que vemos y tragamos la tenemos solo nosotros, si fuésemos sensatos tendriamos coche, pero iriamos en bicicleta a trabajar. Nos dolería la cabeza y esperariamos 4 horas antes de tomarnos un analgésico, pero no, como somos unos mierdas y no aguantamos un poco de dolor nos lo tomamos al primer indicio. En vez de comprarnos esa camiseta que tanto nos mola, como tenemos de sobra, no la comprariamos… y un largo sin fin que todos sabemos como sigue…
Nuestro problema es el egoismo, no la ciencia ni los avances tecnológicos.
Qué lujo de comentaristas, así da gusto...
ResponderEliminarBásicamente, eulez lo ha resumido muy bien: coincido en que por los beneficios que puede producir el LHC, más nos vale escatimar un poco en otros gastos energéticos, que siempre han existido las prioridades.
Maremoto, no te preocupes ya explicaremos en alguna entrada divulgativa las maravillas de los árboles filogenéticos. Es genial que nos aportes algo desde otras ramas del conocimiento, espero que lo de la sostenibilidad no sea sólo una moda, "porque vende", y la verdad si todas las tecnologías se van haciendo más eficientes, será gracias a que la ciencia no pare en su ritmo. Por eso es tan importante que lo último en que se recorte el gasto sea en educación e investigación, precisamente.
Bienvenido bioxano, es un placer tenerte como comentarista y espero que repitas! Es interesante lo que apuntas, ya que todos entendemos que el problema en sí es real (copepodo lo ha expuesto claramente), tal vez este señor ha querido llamar la atención para despertar conciencias. Pero entre la pinta de guiri que tenía el hombre, así en shorts subido a la tarima, y la polémica que desataba, la verdad creo que le salió el tiro por la culata (dicho todo desde el cariño y el respeto, es que en serio el tipo era de lo más gracioso).
Copepodo, lamentablemente el pesimismo me parece que lo compartimos casi todos. Pero bueno, a mi me gusta sentirme esperanzador, y creo que una buena oportunidad es apostar por la educación: las generaciones venideras, si tienen tan claro como nosotros que este despilfarro es inviable, conseguirán, estoy seguro, igualar o superar el nivel de avance del conocimiento sin tener que jugársela como lo estamos haciendo nosotros, arrastrando un sistema de derroche de energía ya obsoleto.
Hombre banchsinger, como siempre tu prosa poético-rural deja las cosas más que claras: el símil del cuchillo es explícito como pocos (la jamonina sigue corriendo por tus venas!).
Resumiendo: todos coincidimos en que el problema es real, y que debemos afrontarlo, pero no más que en el resto de nuestro entorno, ya sea familiar, profesional, vacacional, rural, fenomenal, etceteral.
Así que ale, todos a ir en bici y a apagar el emule por la noche, pero ¡seguid trabajando, por el amor de Darwin!
¡Hombre, qué alegría PERRO MALO, hacía tiempo que no te leía por aquí!
ResponderEliminarMe alegra que alguien de letras también aporte su opinión al respecto; está claro que debemos YA MISMO aplicar esta "conciencia" que dices a todos los ámbitos, y también es cierto que gran parte de los descubrimientos científicos vienen más por el trabajo continuo que por la casualidad o inspiración meditativas y puntuales.
Por otro lado, estoy percatándome con estos comentarios de que todos tenemos una gran fe, a veces ciega, en los beneficios de la ciencia y su absoluta necesidad... lo cual me hace preguntarme si no estaremos exagerando... la próxima pregunta que lance para el debate me parece que irá por esos derroteros, así que ir pensándolo, amigos.
Cuando era más joven y llovía se limpiaban los coches. Ahora llueve y dan asco. Los que vivimos en las ciudades estamos respirando veneno puro. No quiero ser apocalíptico, pero nos lo estamos cargando todo y ha sido en los últimos 40 años, imagina de aquí 200, si todo sigue a este ritmo exponencial. A mi esta gente que quiere ser mas marxista que Marx me hace mucha gracia. Anda que no hay frentes para pelear, antes que meterse con lo que contamina la ciencia. Los científicos deberían estar unidos entre ellos y con los gobiernos municipales, autonómicos y centrales para buscar soluciones a corto y medio plazo. Pero no es rentable. Los molinitos eólicos si que rentan y ahi están. Cuestan más de lo que producen pero ahí los tienes porque se ven. El problema se empezaría a resolver (como todo) con educación medioambiental y concienciación ciudadana. Pero eso lleva siglos y aun no hemos empezado. Os dejo una cita atribuida al gran Asimov: "El aspecto más triste de la vida actual es que la ciencia gana en conocimiento más rápidamente que la sociedad en sabiduría"
ResponderEliminarTo think that based on our poor understanding of the ecology of this planet, we should slow the advancement of science, which gave us our understanding in the first place, seems rather idiotic.
ResponderEliminarImagine you go the doctor and he says something's wrong with you and that he would like to make some tests, and then you punch him in the face and leave. That doesn't really help with your illness, does it?
Besides, what except science could help us fight the problems we face on this planet, like high population growth and high child mortality rates, global warming, antibiotic resistant strains of bacteria, reduction in biodiversity, etc... ?
Hervé Philippe et al. work on phylogenies. One might say: "Well, that's just for the textbooks. We won't get much information out of how some species are related to others. It's not worth the CO2!". But actually, phylogenies help in a lot of things like tracing back epidemics (HIV/AIDS, Flu, ...), they serve as a tool in conservational biology and provide insights the way species originate, which might also be helpful in evolutionary medicine.
However, there are some fields in science that are tremendously well funded but rather useless fighting global problems. Military research is one example. Just look at this wonderful chart made by David McCandless ( http://www.informationisbeautiful.net/visualizations/the-billion-dollar-o-gram-2009/ ). Money is spent for a lot of stupid things and with that go vast amounts of CO2 emissions. And these fields should slow down.
Science, in the sense of physics and biology, is the last field that should step back.
If you want to fight injustice in the world and make this planet better than it currently is don't just ride your bike and put out your lights.
Don't get me wrong, these ARE good things. But what really is necessary is that govermental data becomes available for the general public, so that questions can be asked about it.
I live on Gran Canaria, and I find it very hard to get any information out of the government concerning money spent on anything. Imagine how much information they would provide if I'd ask them about CO2 emmisions.
For those who can't avoid being pessimists I recommend the website www.ted.org ... lots of great talks of people who want to build a better
world using science.
And sorry, I feel more comfortable writing about these topic in english than in spanish. I hope you forgive me.
- Rob
Wow, I'm glad this post still generates comments!
ResponderEliminarRob, I absolutely agree with your point. And I'd go even further, cause not only physics and biology but many other not experimental sciences, history, archaeology... many many subjects of study are necessary to understand what we have done wrong in the past and in the present. Information is the most useful tool.
Thanks for the comment and don't bother about the language, I always wanted to translate the blog but automatic translators are not big deal for such an absurdly-written webspace!