Reporteros ¡Jindetrés, sal! (12): Los investigadores de terracota y el género wuxia

Desde el lejano oriente nos llega una nueva contribución para nuestra colección de sobrecogedoras instantáneas alrededor del globo. De nuevo de la mano de la Primasa y el Raulómero, y repitiendo en el gigantesco país de China (con el que se inauguró esta sección, no lo olvidemos), esta vez el nombre de nuestro rinconcito científico-lúdico se muestra nada más y nada menos que acompañado de los famosísimos guerreros de terracota de Xi'an.

Aquí podría acabar el post, mostrando las fotos mandadas con tanto cariño por nuestros queridos colaboradores. Pero no, últimamente me da por ver el lado cinéfilo de la vida y he decidido ampliar el post para comparar estas fotos con una de mis películas favoritas de los últimos años. Podría haberme acordado de El último emperador, de Bertolucci (que fue rodada en este mismo palacio); evidentemente, la cosa es algo más rebuscada.

La Primasa inmortaliza nuestro blog a la entrada de la Ciudad Prohibida.

Observando el imponente espacio donde se alza el palacio en la foto de aquí arriba, me acordé de la película "Héroe", de Zhang Yimou. Algunas de sus escenas tienen como fondo este mismo escenario, ya que la acción transcurre en la época de consolidación de la dinastía Qing. No voy a desvelar detalles de la trama, simplemente saber que se enmarca en este momento en que Qing Shi Huang se autoproclamó primer emperador de un territorio chino unificado, utilizando este marco histórico para desarrollar una apasionante trama de lealteades y traiciones, ideales utópicos y pasiones desenfrenadas; todo ello mostrado en un envoltorio formal exquisito, convirtiendo el film en un espectáculo colorido y emocionante. Zhang Yimou es un autor muy preocupado por la estética, que cuida la paleta de colores en cada fotograma hasta un extremo inusual.  Aunque en términos generales la película se enmarca dentro del género wuxia (ya sabéis, chinos volando por los aires dándose candela a diestro y siniestro), la complejidad estética y narrativa de "Hero" daría para varios posts, así que vamos a quedarnos con los datos que la relacionan con las fotos recibidas por nuestra redacción: por un lado, el ya mencionado escenario de la Ciudad Prohibida; por otro, la fiel recreación  de los ejércitos del emperador Qin que nos lleva a la siguiente colección de fotos de nuestros amigos: los guerreros de terracota de Xi'an.

La verdad es que el guerrero posa mejor que mucha gente que conozco.

Aunque no pudieron retratarse cartelito en ristre en el mismo mausoleo, los amiguetes tuvieron el detalle de incluir a uno de estos simpáticos señores de terracota (seguramente el de la foto sería de poliespan) en las fotos del reportaje, simbolizando su paso por este mítico lugar. Indagando en interné, he podido comprobar hasta qué punto los ejércitos de terracota sirvieron como inspiración para la película, como se puede apreciar en las fotos que siguen:

Aunque los complementos de las esculturas se perdieron en su mayor parte, este "arquero desarcado" está presente en los ejércitos de la película, en la cual algunas de las escenas más bellas y originales están protagonizadas por las lluvias de flechas lanzadas por el ejército del emperador.

Pero lo más curioso es lo que me he encontrado al intentar buscar documentación gráfica para el post: lo primero que aparece en "imágenes de Google" al poner la palabra "Hero" en el buscador es lo siguiente:

Si después de colar esta foto las visitas del blog no se disparan, yo cierro el chiringuito.

Impresionante, sin ningún género de duda. Por si esto fuera poco, además me he encontrado con este viejo amigo que los lectores más jóvenes no reconocerán:

Este tío sí que era un héroe; por mucho que le pagaran, para salir de esa guisa 

en la tele y encima darse las leches que se daba, hay que tenerlos bien puestos.

Tras este broche de oro para el reportaje, la verdad no nos resta mucho más que agradecer de nuevo a los colaboradores por sus instantáneas y recomendar el visionado de esta maravillosa cinta de artes marciales. Por cierto, no es la única obra del director enmarcada en este género; no menos espectaculares (aunque a mi no me gustan tanto como la que hemos comentado) son La casa de las dagas voladoras o La maldición de la flor dorada; además en su filmografía se cuentan otras joyas totalmente distintas en su temática pero igualmente bien rodadas y llenas de sentimiento, como El camino a casa. Otro dato curioso es que fue este mismo director el encargado de diseñar y coreografiar el espectáculo de inauguración de los juegos Olímpicos de Pekín en 2008.

Multitudes, colorido desmesurado, coreografías imposibles y gente volando. Demasiados puntos en común entre el cine de artes marciales, un evento deportivo, y las hordas de visitantes que invaden ruinas milenarias. Si los guerreros de terracota cobrasen vida, no se sabe si saldrían corriendo o volverían a enterrarse.

El héroe "Sin nombre" se enfrenta al ejército del emperador a las puertas de su palacio. Debajo, nuestros héroes particulares enfrentan un ejército de turistas para conseguir una instantánea digna de nuestro no menos épico blog.