En lo que se ha convertido en una improvisada serie de entradas, os presento hoy una versión cientificada del mismísimo Espíritu de Venganza. Como en la ocasión anterior, un huequecito en blanco sirvió de base para el boceto:
Premio gordo para quien adivine, entre todos los garabatos correspondientes al día a día de laboratorio, un par de diagramas que no tienen absolutamente nada que ver con la biología. Es decir: el cilindro y el círculo, ¿qué representan?
Que posteriormente derivó en la viñeta siguiente:
Hay más ideas en la recámara, pero no os las anuncio por si luego no me saliesen los dibujos, que a priori son algo más complicados.
Sí senyor, muy bueno, una buena alegoría al Principio de Incertidumbre de Heisenberg aplicado a la biología molecular... me descojono!!!
ResponderEliminarAnda que no me quieres bien ni nada, menuda interpretación más profunda! Tú sí que estás hecho un genio, ni se me había pasado por la cabeza relacionar la incapacidad del motorista para revelar sus membranas con el principio de incertidumbre... chapó!
ResponderEliminar