Después de mucho pensar qué tipo de título pondría a las reseñas de cada entrega jofera, me parece que me voy a decantar por esto de las rimas tontas. A no se que se me ocurra algo mejor. O tal vez todo lo contrario. Vamos, que iremos viendo sobre la marcha. En cualquier caso, aquí os traigo el último número de la revista confeccionada por Quique Royuela y su equipo, incluyendo a vuestro bloguero favorito. Y yo también participo, además. Pero seguro que entre toda la panda de magníficos redactores se encuentra vuestro favorito, o alguno de ellos. Claro que igual no. Pero es muy probable que sí. Como veis, hoy tengo el día un poco atontado, será por mis últimas experiencias con la burocracia estatal y las bofetadas de la profesión.
He tardado en promocionar este número, con fecha de septiembre (la publicación a su vez se retrasó un poquillo), porque me gusta antes leer los artículos con detenimiento. Auqnue no he terminado con todos, no quería esperar más. Pero sin duda puedo decir ya que es uno de los más redondos hasta la fecha, tanto por contenidos (en variedad y calidad) como por lo elaborado de los artículos. Me parece que digo algo así con cada número pero no es de extrañar porque como es lógico aprendemos de nuestros errores y decisiones menos acertadas, y cada entrega supera a la anterior. Podremos comprobar esta hipótesis muy pronto, porque con lo que he tardado en publicar esta reseña, ya está a punto de salir el siguiente número, así que si no lo habíais leído, ya os estais dando prisa o se os acumulará la faena.
Mi contribución en este número consiste en un artículo sobre inmunología, donde intento arrojar algo de luz sobre fenómenos tan comunes y cotidianos como los mecanismos que permiten a nuestro cuerpo defenderse de invasores externos, y que ayudan a entender cómo funcionan la vacunación o porqué se producen las inmunodeficiencias.
Pero permitidme que destaque por encima de todo lo destacable, una nueva colaboración que me llena de ilusión (toma ya, otra rima). Se trata nada más y nada menos que del estreno como Jofero de nuestro querido compañero y contribuyente habitual en esta casa Banchsinger, que firma un completísimo artículo sobre técnicas de biología molecular. Como digo, me resulta muy satisfactorio haber conseguido despertar la pasión por escribir sobre ciencia de mi ex-compañero de laboratorio, algo que en mi opinión nunca había pasado realmente por su cabeza hasta que le fui convenciendo poco a poco de que debía transmitir a los demás esas reflexiones tan interesantes y a menudo divertidas que compartíamos cuando comíamos juntos o cargábamos geles mano a mano. Leer su elaboradísimo artículo en este número de JoF me hace sentir parcialmente responsable y por tanto orgulloso de haber contribuido a que un gran científico comparta sus conocimientos con el resto de la sociedad. Sin duda, una de las mejores cosas que pueden derivarse de esta tontería de escribir en un blog.
Para terminar, destacaré para los morbosos que el número se cierra con una breve reseña de aquel evento divulgativo tan estimulante en el que tuve el honor de participar este verano, el Street Alicante Science o Stas para los amigos. Quise ahcer una reseña en su momento, pero se fue quedando atrás en el montón de posts pensados pero nunca ejecutados. Así que ahora podéis echar un vistazo a aquella emocionante experiencia que supuso salir literalmente a la calle a hablar de Ciencia a la gente que pasaba. Sí, tan friki como suena. Os recomiendo que lo leáis y además así podréis poner cara a muchos de los habituales de esta blogocosa científica. Bajo vuestra propia responsabilidad...
Y eso es todo por hoy. Nos vemos en la reseña de JoF #7, voy a ir pensando una rima absurda.
Maese, su opinión es bien cierta. Usted tiene toda la culpa de que el menda haya metido las narices en este mundo que jamás pensé pisar, para bien o para mal. Bien es cierto que yo solo no lo hubiese hecho, pero dicen que todo se pega menos la hermosura (prueba es que yo sigo feote), pero parece que la genialidad tiene transmisión horizontal (el porcentaje no es muy alto, pero suficiente). Lo de "esas reflexiones tan interesantes y a menudo divertidas" solían ser tontadas como pinos, probablemente fruto de los vapores del B-Mercaptoetanol en conjunción con la acrilamida, pero solo los cracks como usted se dan cuenta de que pueden ser muy útiles (con la debida modulación) para transmitir la ciencia a la gente que la desconoce (pongan ustedes la finalidad que quieran, pero no es necesario). El placer, la satisfacción y la suerte han sido mías, primero porque me ha descubierto una actividad que por encima de todo me gusta a mi y a mi ego (como diría @eulez). Luego, por que he aprendido infinitamente mas de lo que he enseñado o pretendido enseñar (no se si con acierto o como me hubiese gustado). Y como postre especial, porque me ha permitido "conocer" a gente afín a la ciencia en blogosfera, cosa que se ha traducido finalmente en la oportunidad de colaborar en la redacción de esa titánica empresa sin ánimo de lucro que el loco y genial @eroyuela (y su cuadrilla no menos chiflada y genial) emprendió hace ya siete números de JoF (bien sabe que va usted tarde Dr. Litos). Lo de gran científico aun está por demostrar, aunque espero que esta suerte de participar en la divulgación científica sirva, además de para autodisfrute, para poner una poca luz o siquiera una chispa en aquellos que sin saber que es la ciencia (o ya expertos de su campo) se quieran aventurar a conocer un poco mas... que nunca ha estado de menos, pero en los tiempos que corren aun es más necesario.
ResponderEliminarLa pena que siento, es que lo de las rimas no se te haya ocurrido a partir del número cinco, jaja.
ResponderEliminarPues repasa la anterior reseña y verás que precisamente lo de la rima se me ocurrió con el número pasado... ¡por eso hice el título en inglés! ;D
EliminarGracias Dr.!! Lo leeremos con amor. Las palabras ya ha sido esparcidas en derredor, entre el joven y el mayor.
ResponderEliminar¡Hombre Maño! ¡Qué alegría! Gracias por difundir, sobretodo entre la muchachada, tan falta de estímulos y acienciamiento. Mil gracias también por el comentario, ¡rimado y todo!
Eliminar