miércoles, 4 de abril de 2012

Diario de un viajero en el tiempo (I): investigando en busca de la investigación

 
Cronodiario. Lunes, 4 de abril de 2113
 
12:00 - Desde que salí del dispositivo de traslación temporal, las sorpresas no han parado de sucederse. Lo primero que me llamó la atención fue la increíble similitud entre el siglo XXII y 2013, fecha de la que partí. A nivel tecnológico y urbanístico, la España que he encontrado no difiere apenas de la que dejé atrás: los automóviles son más estilizados y sus diseños diferentes a todo lo visto antes, pero siguen funcionando por motores de combustión. El ambiente está enrarecido, de hecho. Algo parecido sucede con las edificaciones: si bien las líneas de los edificios se han refinado, sigue utilizándose mayoritariamente el ladrillo y el hormigón (ver ANEXO F para una descripción detallada de las localizaciones).

13:30 - Comienzo mis pesquisas de orden antropológico: veo colas en los ambulatorios de la seguridad social y gente saliendo con cara de mal fario de los locales de la administración estatal. Sucursales bancarias, supermercados, tiendas de barrio… sólo sutilmente diferentes. Los bares siguen presentando el mismo aspecto clásico, y siguen estando regentados por personas de ascendencia asiática, posiblemente china; esto tampoco ha cambiado. Decidido a empezar a reunir datos más fiables, tomo asiento en uno de los numerosos bares y me uno a un grupo de locales que conversan animadamente. Lo primero que me llama la atención es que son todos rubios, y en un principio temo haber caído en un grupo de turistas extranjeros; mas mis temores son infundados, pues al poco de escuchar varios “osti tu” y “xé, fideputa!” me convenzo de que estoy rodeado de oriundos valencianos, pese a sus áureos rizos y pálida tez. Me invitan a cerveza. Acepto por cortesía, pero me propongo mantenerme firme en mi intención de estudiar esta sociedad futura sin demasiadas interferencias.

19:00 - Tras cuatro horas de deambular por la ciudad de manera errática en estado de absoluta embriaguez, encuentro por fin el dispositivo de traslación temporal. Antes de entrar, me tomo un tiempo para recapacitar sobre la cantidad de datos obtenidos. Intentaré resumirlos brevemente en esta parte del diario, además de adjuntar un informe completo (ANEXO G).

Al parecer, la sociedad española ha sufrido una transformación acelerada durante las últimas décadas. El fondo genético de la población ha pasado del tipo mediterráneo original a un tipo nórdico-germánico, propiciado por la avalancha de inmigrantes de estos países, principalmente de Alemania. Intrigado por esta cuestión, entre jarra y jarra de cerveza, interrogué a mis interlocutores una y otra vez acerca de este curioso fenómeno migratorio, pero no obtuve más que razones ambiguas. He confeccionado una hipótesis basada en la situación que dejé en el siglo XXI, a saber: las condiciones de las poblaciones turísticas de la costa levantina, donde los turistas alemanes empezaron a tener una importante presencia en los años 2000, se extendieron durante los dos últimos tercios del siglo al resto de la península mediante movimientos migratorios extremos, propiciados por el abaratamiento de los costes turísticos y las ventajas fiscales facilitadas a los sectores de la construcción y hostelería. Al parecer, estas migraciones fueron facilitadas a su vez por un éxodo de gran parte de la población local, mayormente de los sectores poco relacionados con el turismo y la restauración.

Estas revelaciones me dejan inquieto y alterado, pues no dejo de preguntarme cómo es que el avance que supone haber descubierto la manera de viajar en el tiempo no ha producido un desarrollo científico y tecnológico vertiginoso en el país donde se produjo. Al ser preguntado por esto, y tras tener que explicar varias veces lo que las siglas I+D significaban en mi época, uno de los simpáticos cerveceros me comentó que si quería saber algo de investigación no lo encontraría por aquí, en todo caso en Alemania, de donde venían sus antepasados. Así que, sin esperar confirmación por parte de la base, embarco y me dispongo a desplazarme (sólo espacial, no temporalmente) hasta el mencionado país para desvelar el misterio y concluir mi misión de exploración futura.

19:10 - Debería haber esperado, al menos, a que volviese mi sobriedad antes de embarcar. Detallo protocolo de limpieza de la cápsula de traslación en el ANEXO G.1.
 
Continuará

7 comentarios:

  1. ¡¡Osti, tu, Ojiplático perdio me has dejao!!,Tengo intriga de saber por donde irán las andaduras de este señor, pero mucho me temo que nuestra imaginación va por sitios parecidos. Me sigue encantando tu forma de criticar a través de viajes en el tiempo y misiones científicas...

    PD: una idea... ¿como va china y EEUU en el 2113? que ha sido de la religión? sigue lloviendo en semana santa? ha sido sustituida la teoría de la evolución de Darwin y Wallace? ahí lo dejo jejeje

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  2. Que bueno. Además de económicamente, nos terminan invadiendo de "facto". Sólo faltaría que llevaran sandalias con calcetines y bermudas de flores. No si cuando el abuelo decía que con el euro nos la habían metido pero bien, tenía razón. A ver la moneda que se usa aquí en el capitulo II.
    Me encantaría ver uno con pinta nórdica diciendo "cheeee tuuuu, cagon l'hostia putaaaaaa."

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  3. Eso, eso. A ver en qué queda el misterio. Esperemos que el crononauta no se abandone definitivamente al alcohol, jejeje

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  4. ¿derribaron el Algarrobico o qué?

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  5. Gracias por las sugerencias compañeros, intentaré responder a algunas de estas incógnitas en la segunda parte, que ya tengo a medias by the way.

    Oskar, me temo que tus preguntas transcienden la mini-crítica puntual del relato, tendrán que ser respondidas en otros crono-diarios (jo, no hago más que crear nuevas sagas sin querer!).

    Copépodo, tranquilo que el alcohol seguirá presente en la segunda parte, faltaría más!

    Y Sr. Belizón, me atrevería a pensar que dado el panorama turístico-demencial de este futuro, no sólo no se habría derribado sino que posiblemnete le hubieran salido sucursales.

    ¿Conseguirá el crononauta averiguar el misterio de la investigación desaparecida? ¿Se han extinguido los españoles en el año 2113? ¿Producirán las borracheras del viajero en el tiempo una alteración irrevocable del tejido espacio-temporal? Todo esto y mucho más, en la próxima entrega.

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  6. Tu argumento hace agua tio...sin I+D de donde saca el "dispositivo de traslación temporal"? uyuyuyuyuy...
    No sin embargo, la situación cómico-penosa muy entretenida, si señor.

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