lunes, 28 de septiembre de 2020

En busca del pico perdido

- Hola Carlos, ya tengo los resultados de la cromatografía. 

- ¡Fantástico! Veámoslos. 

- Bueno, eh, la verdad es que es mejor que no te entusiasmes... 

- ¡Que no me entusiasme! Si esta es la parte más emocionante de nuestro trabajo: observar con nerviosismo los resultados obtenidos, tras semanas de arduo trabajo, para desentrañarlos hasta dar con la respuesta a las preguntas que nos planteamos. Ya sé que enfrentarse a los picos del cromatograma es difícil y tedioso, pero la sensación cuando un pico particular, un pico concreto, aparece donde no debería o su amplitud es marcadamente diferente... ahí es donde reside la grandeza de los descubrimientos. ¿No estás de acuerdo? 

- Sí, bueno... todo eso está muy bien pero no creo que sea para tanto.

 (fuente: futura tesis de Conchín)

- ¡Que no es para tanto! Será posible. Dime una cosa Conchín, ¿has visto Los últimos día del Edén?

 - No sé qué es eso, pero no suena bien.

- Es una peli. La cosa es que Sean Connery interpreta a un científico un poco excéntrico que vive en la selva amazónica, y está analizando la composición química de las plantas en busca de un compuesto con potencial para curar el cáncer. O algo así, no me acuerdo bien.




- Ya. Y eso tiene relevancia porque…

- Pues porque se pasa toda la peli intentando reproducir un resultado, que es un pico concreto que solo aparece en uno de los cromatogramas que obtiene con sus experimentos. Bueno para no hacerte espoilers

- Oh no, por favor, faltaría más.

- … digamos que al final resulta que el pico misterioso no correspondía con las muestras que él creía, por eso le costaba tanto reproducirlo. ¡Es fantástico! ¡La cura para el cáncer oculta en un diminuto y esquivo pico que representa una cantidad relativa de un pequeñísimo y aparentemente insignificante péptido! ¡Imagina que entre tus resultados hay un pico semejante! ¡¡Por qué no te motiva esto!!

- Pues porque no me ha salido ni un pico.

- QUÉ.

- Pues eso, ni uno. Ha salido plano, el cromatograma.

- ¿Plano?

- Como una tabla de planchar.

- ¿Ni un pico?

- Menos que en la meseta central.

- Bueno, es lo que tiene la ciencia en la vida real. Se parece muy poco a la de las películas. Tampoco el laboratorio se parece al Amazonas, ¿verdad?

- Casi tanto como tú a Sean Connery.


Este relato es una nueva contribución a @divagacionistas cuyo tema esta vez era #relatosPicos y está parcialmente basado en hechos reales