sábado, 31 de diciembre de 2016

La carta de Darwin

Para despedir el 2016, os traemos un documento recientemente desclasificado y enviado de forma anónima a la redacción de ¡Jindetrés, sal!. Se trata de un nuevo documento histórico de valor incalculable, una carta inédita de Charles Darwin donde expresa ideas y opiniones aún más relevantes y de consecuencias más abrumadoras que las vertidas en el último documento que publicamos el año anterior

Qué más puedo decir. Pese al estado casi catatónico del blog, no se concibe un fin de año sin la presencia de nuestro barbudo amigo. Aunque tenga que ser in extremis y con recursos más que precarios. Espero que os despierte, como poco, una sonrisa; y que empecéis 2017 con ánimo y voluntad para ser felices y hacer de este mundo un lugar menos lúgubre y tenebroso.




¡FELIZ 2017!


7 comentarios:

  1. Querido Charles Robert Darwiiiiiiiin,

    Solo quiero pedirte una cosa para este año que empezamos, y es que, a pesar de esa repletísima agenda tuya que te impide actualizar el blog más a menudo, sigas encontrando un huequecito cada comienzo de año para currarte un mensaje como este u otros precedentes.

    Cada año espero con impaciencia ese mensaje crítico y constructivo de nuestro barbudo favorito. Un mensaje siempre cargado del más puro y sencillo sentido común, y acompañado de las más sanas intenciones, ambos valores que escasean en estos días pero que tú no te cansas de recordarnos.

    Espero que puedas seguir dedicando al menos un rato cada principio de año para, con mayores o menores recursos (materiales, técnicos y humanos, que ya sabemos que no siempre puedes contar con el equipazo de ediciones anteriores…), mantener esta tradición aun cuando te las tienes que arreglar tú solito y en tiempo récord para concebir la idea, grabación, montaje (¡y hasta la música!) de este delirio anual. Bravo.

    Mucho ánimo para este 2017 y ojalá se cumplan tus deseos.

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    1. Muchísimas gracias a ti, Consuela, por dedicarnos un comentario en esta época de escasez y sequía blogueriles. Y descuida que si este año he podido apañármelas para traeros este documento, no dejaré de hacerlo mientras el cuerpo aguante. Con mayor o menor gracia, pero aquí estaremos.

      Un abrazote querida

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  2. ¡Cuánta razón hay en esa carta!

    Feliz año nuevo. Saludos.

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  3. Grande!

    PS.- El virus del blogero_que_antes_hacía_comentarios_y_ahora_no me impide saludarte como Darwin mand y desearte lo mejor para este nuevo año. Ojalá podamos coincidir de nuevo, que a este paso nos veremos en algún viaje del Imserso

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  4. ¡Muchas gracias, queridos y preciados comentaristas, parroquianos! Hoy en día tres comentarios valen tanto como 20 en la Época Dorada del Bloguerismo :_D

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  5. Yo he contado cuatro. Y con este cinco.

    Disfruta el récord, que puede que no se supere en todo el año :P

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